viernes, 26 de junio de 2015

Musicalizando la vida desde el vientre

Desde que tengo memoria, recuerdo aquellos viajes largos que hacíamos con mi familia, y a mi papá, quien estaba al mando del volante, siempre musicalizando el trayecto. Así conocí a los Rolling Stones a Led Zeppelin, Ottawan, El Tri (cuando cantaba en inglés) esos son a quienes mas recuerdo, había otros más que la verdad no llegan a mi mente en este momento.

Crecí en una ciudad muy pequeñita llamada Lázaro Cardenas en el estado de Michoacán, era un lugar tan pequeño e insignificante que no había mucho que hacer, así que algunos domingos íbamos a la playa, cosa no muy frecuente pues a mi mamá no le gustaba, pero cuando no paseábamos por la playa, nos íbamos a la Pérgola, así se le conoce al centro de la ciudad. Alrededor de esta plaza o Pérgola había varios locales; el de las paletas, algunos restaurancitos y una gran tienda de revistas y discos LP. Sí, notese mi edad con eso de los discos LP, así que mi papá nos llevaba ahí a mis hermanos y a mí y había domingos en que nos dejaba escoger una revista o un disco, así que aprovechábamos para comprar historietas de la Pequeña Lulú o Archie y por qué no, un buen disquito de música. Creo que eso influyó bastante para que mi hermano y yo seamos tan musicales.

Aunque también hay que agradecerle a mi mamá, porque fue ella quien me llevo desde muy pequeña a conciertos cuando veníamos de vacaciones a la Ciudad de México, siempre buscaba algún concierto de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México para escuchar música clásica en vivo, además de que de pequeños los fines de semana mi mamá osaba despertarnos con música clásica a todo volumen, cosa que en mi infancia no me gustaba mucho, pero que con el tiempo fui extrañando.

Mi primer concierto fue a mis 13 años de edad y fui a la Ciudad de Morelia a ver a Alejandra Guzmán e invité a mi mejor amiga de la primaria, aunque para ese entonces ya íbamos en secundaria. Nos acompañó mi hermano Adolfo, era demasiada nuestra emoción; cantar todas las canciones y gritar como locas por esa artista.

Desde siempre, la música ha sido elemental para mi vida diaria. Desde que me subo al carro, si hay mucho tráfico, pongo música para que me sea leve el viaje. Cuando trabajo me gusta hacerlo con música y durante mucho tiempo cuando era soltera y trabajadora "Godín", gastaba todas mis quincenas en comprar CDs o boletos para asistir a algún concierto, de hecho hubo un tiempo en que trabaje en Ticketmaster y bueno, era la más feliz, pues regalaban boletos para ir a conciertos y como ya sabrán, asistía a cuanto pudiera.

Así pues, en mi vida la música ha sido muy importante y siempre me ha traído buenos recuerdos, y esto es algo que también me gustaría fomentar en mi hija. Alguna vez vi un documental donde se hablaba de la importancia de la música en la vida de los niños, en general de todo tipo de música rítmica (no estamos hablando de música tipo reggeaton ni mucho menos de banda) en el documental se explicaba cómo esto aumentaba la inteligencia en los niños que escuchaban música sobre la de aquellos que no y se me quedó grabado.

Entre la semana 14 y 15 es cuando los bebés ya tienen desarrollado el oído y se podría decir que ya escuchan sonidos del exterior, así que yo empece a ponerle música desde la semana 20, un poquito tarde, pero procuro por lo menos cada fin de semana colocar los audífonos en el vientre. La primera vez que lo hice me llenó de emoción, pues mi vientre se movía en todas direcciones y fue bastante divertido, además le cantaba, así que de verdad sentía mucha emoción con mi marido al lado y los dos con las manos puesta en mi panza.

La primera vez que lo hice fue buscando música en Spotify o en YouTube, pero teniendo a mi hermano Adolfo le pedí que me armara un playlist especial para Valentina y bueno, se las comparto. Está un poco variadita, pero hay que tener de todo en esta vida.


Aquí se las dejo, espero les guste...

https://open.spotify.com/user/maravert/playlist/16UQOdwVHlo6AppF19VihG




lunes, 15 de junio de 2015

Los buenos deseos

Pues sí, muchas personas al verte te dan sus "buenos deseos".

Te llenan de consejos, de sus experiencias, de anécdotas que a veces no sabe una como nueva qué hacer con ellas. En esta semana, como ya se empieza a notar mas mi panza, la gente que me ve me llena de sus anécdotas, pero sus experiencias a veces no son tan buenas y otras sí ayudan, así que una va escuchando lo que se le presenta, pero a veces no es bueno tomar todo lo que te dicen.

La semana pasada fuimos al cumpleaños 40 de una muy querida amiga, aun sabiendo que no conocíamos a nadie, pues aunque soy su amiga, no conozco mucho su mundo y mucho menos a sus amigos más cercanos, y de los que conocía nadie iba asistir a dicho evento. La filosofía que seguimos mi marido y yo es siempre hacer platica con la gente, integrarnos y conocer nuevos mundos, así pues fuimos al evento y sí, no conocíamos a nadie. Por ahí vi una carita familiar que igual que nosotros iba con su esposo, así que nos juntamos en la misma mesa. A esa misma mesa se integró otra pareja mas grandecita que nosotros. Todo iiba perfecto, iniciamos plática, reíamos, ellos bebían y nos conocimos, hasta que vieron mi panza e inició la conversación alrededor de ella y de todo lo que nos espera a la llegada de mi bebé.

Inició todo muy bien, algunos consejos rescatables como el de no crearle necesidades a los hijos, totalmente de acuerdo, como por qué comprar la cuna, la carreola o la silla más cara del mundo cuando no hay necesidad. Para mí los niños no necesitan tanto gasto, sobre todo cuando el artículo que te cuesta barato te va a dar el mismo servicio que el más caro. Ellos ni conocen la diferencia, mejor invertir el dinero en un fondo de ahorro para pagarle los estudios a tus hijos, o invertirlo en pagarle a una persona que te ayude con todo el trabajo que implica el tener un hijo o dos. Eso para mí lo vale, no una carreola de 60mil pesos.

Lo que si ya aburrió fue que entraron en temas de pareja y que resultó que ellos iban en la segunda vuelta. Ella se divorció  de su primer esposo, pues además de haber sido su novio desde los 14 años, se había casado muy joven con él  (no me pregunten de qué edad) y rápido decidieron tener familia, 3 hijos varones. Resulta que terminaron porque él le fue infiel. Ella me decía que  jamás dejaría que su esposo tuviera una socia (cosa que el mío si tiene y aparte es guapa), me decía que hasta la asistente que le contrató a su actual novio, era lo menos agraciada, cosa que, la verdad y acá entre nos, nunca ha sido mi preocupación. Yo tengo la teoría de que si tu hombre te es infiel, te será infiel hasta con la más fea, eso es una enfermedad o de plano porque le gustan ese tipo de emociones. 

El caso es que ya llegó un momento en que yo ya bostezaba de tanto consejo y digo, no está mal que te aconsejen y que la gente te quiera ayudar, pero... todos los consejos se basaban en experiencias que a mí ni me han pasado ni me preocupan. Como es el caso del esposo infiel.

Es chistoso como te ven como una pareja "joven" y todo mundo te quiere dar consejos, pero creo que eso es muy de latinos, como que de otras nacionalidades les vale si te llevas bien o mal en pareja o si duras o no toda la vida, aquí deseamos que quienes se casan vivan felices para siempre y pues sí, ¿quién no?

En cuanto a las opiniones que he recibido de parir natural, hay quienes te asustan que si te vas a volver incontinente o que ya no le darás el mismo placer al marido, que duele de lo mas horrendo y que al dar pecho, tus boobs caerán y que también duele, que se agrieta la piel y que a veces sangran. Yo he leído que mucho depende de cada persona y de cómo te cuides. En el caso de que si te vuelves incontinente o si ya no le darás placer al marido, para eso existen los ejercicios Kegel, que fortalecen los músculos de la vagina, y tengas o no hijos, debes de hacerlos rutinariamente. Y acerca de los pechos, yo desde el 5to. mes, que es por ahí entre la semana 18 y 21, empecé a ponerme un bálsamo para pezones para ir humectando esa parte y que a la hora de amamantar no sea tan doloroso, aunque estoy advertida de que el dolor no se quitara por completo :( espero no me vaya tan mal.

Aunque no todo sea del agrado de una, creo que hay que ser selectivo en los consejos que te dan, porque no todo le acomoda a una, así como la moda, hay cosas que no te van y hay otras que se ajustan a la perfección contigo.

Y yo no sé porque la gente es muy contradictoria, en cuanto saben que ya tienes un novio en puerta, inician las preguntas de ¿cuándo se van a casar? te casas y luego inician con la siguiente pregunta ¿y para cuándo el bebé? y ya cuando estás en el proceso, inician el asustarte con todo lo que rodea la llegada de un bebé, que si no vas a dormir, que te vayas acostumbrando a los gritos, que tu casa nunca volverá a estar limpia, que aproveches los momentos de silencio, que el organizar su fiesta de cumpleaños es una chinga, que si nunca tendrás tiempo para tu pareja, que por culpa de los hijos una anda en fachas siempre, que ya no habrá tiempo de ir al cine, y obvio para salir nunca de casa, que te pondrás gorda, que te crecerán los pies, que tu pelo dejará de crecer y se volverá delgado, bueno, una serie de cosas, que una se pregunta ¿en qué me metí? Porque a la gente le encanta asustar, si de por si una anda en mundo nuevo, le decía hace poco a una amiga que sentía, como si me hubieran aventado a un lugar oscuro donde no sé como salir, ni sus dimensiones ni si hay desniveles o si esta en planito. Solo se reía pues ella decía “eso que sientes, creo lo sentimos todas”, y si lo sentimos todas, como por qué seguir en el buleo de todo lo que dejarás de hacer por una criatura, de todo lo que te perderás por ella.

Lo que si me queda claro es que cada quien sufre a sus críos como le da la gana, pero ya veremos cuando llegue esta bebé a este hogar y se los contaré con felicidad o con amargura.

¿Ustedes que opinan?